abril 24, 2025
noticia 16

Claudia Sheinbaum expresó su satisfacción porque Marcelo Ebrard permanezca en
Morena, aunque afirmó que en el partido no hay segundas fuerzas, pues son un
sólo movimiento.

“(Marcelo Ebrard) no puede ser la segunda fuerza ni la tercera ni la cuarta fuerza
porque Morena es una sola fuerza. Entonces, qué bueno que él decidió quedarse en
Morena, pero cuando se creó Morena (…) hay unos estatutos que dicen que la
filiación es individual y directamente dice que no puede haber corrientes”, detalló la
coordinadora nacional de la Defensa de la Cuarta Transformación, en una
transmisión en vivo que realizó a través de sus redes sociales.

Además, Sheinbaum Pardo dijo que la Comisión de Honestidad y Justicia del guinda
le entregó una carta al excanciller en la que viene una parte que explica lo que debe
ser Morena.
La exjefa de Gobierno leyó parte del mencionado documento, en el que se hace
hincapié en que el objetivo primordial debe ser ganar abrumadoramente las
elecciones en 2024 para dar continuidad y ampliar los logros de la Cuarta
Transformación.

Prácticas nocivas
Sheinbaum refirió la necesidad de evitar prácticas nocivas como la compra de
voluntades, alianzas con grupos criminales y el uso indebido de recursos públicos,
que son prácticas que han afectado a la izquierda.

“Somos un solo movimiento, un solo partido, que además representamos el anhelo
del pueblo de México y eso no se nos debe olvidar.

“Por eso la dirigencia del movimiento tiene que tener eso en cuenta y digo la
dirigencia lo que represento como coordinadora nacional de los Comités de Defensa
de la Cuarta Transformación, lo que representan las diligencias estatales de nuestro

partido (…) no es ganar una elección por ganar una elección, nosotros tenemos un
proyecto que tiene que ver con la defensa de esos derechos del pueblo”, detalló.

El pasado 13 de noviembre, durante la conferencia de prensa en la que dio a
conocer que permanecería en Morena, el extitular de la Secretaría de Relaciones
Exteriores detalló que él y sus simpatizantes formaban la segunda fuerza del partido
y tenían que ser tratados como tales.

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